22 de Abril de 2014
Era un martes 22 de Abril cuando un servidor, JM Robles, cogió el móvil y llamó a su amigo Adrián y le dijo “¿vamos a presentar finalmente nuestra idea a Fiware o no? El plazo acaba el Jueves“. Aún me duele la oreja del “Vamos!” que Adrián soltó por el ciberspacio del 3G.
No sólo era la oportunidad de hacer visible un proyecto basado en una gran idea, sino de centrar la atención sobre una necesidad, un problema que sufren millones de personas invidentes día a día, entre ellas, nuestro amigo Antonio: la falta de adaptación de las ciudades sus ciudadanos. A todos.
15 de Diciembre de 2015
Era un martes 22 de Abril cuando un servidor, JM Robles, cogió el móvil y llamó a su amigo Adrián y le dijo “¿vamos
a presentar finalmente nuestra idea a Fiware o no? El plazo acaba el Jueves“. Aún me duele la oreja del “Vamos!” que Adrián soltó por el ciberspacio del 3G.
No sólo era la oportunidad de hacer visible un proyecto basado en una gran idea, sino de centrar la atención sobre una necesidad, un problema que sufren millones de personas invidentes día a día, entre ellas, nuestro amigo Antonio: la falta de adaptación de las ciudades sus ciudadanos. A todos.